EN LOS TIEMPOS DEL CORONAVIRUS (XV)

 En los tiempos del coronavirus:

- Nació al universo común de toda la sociedad como el mejor horizonte posible el sospechoso, intencionado y dirigido, ilógico y hasta perverso término llamado Nueva Normalidad. Los mismos que nos metieron en esto, nos enseñan ahora el mejor edén posible. Para nosotros claro, para ellos la versión mejorada.

- Aprendimos que es de mala educación, al igual que antes, no mantener conversaciones vacuas cuando te encuentras con alguien y el lugar y el momento se estrechan tanto pero no lo suficiente como para salir corriendo. En esos momentos no seas grosero, olvídate de hablar sobre el tiempo y sus previsiones o el fútbol y sus impresiones, habla del coronavirus, lo que sea, como sea, pero habla de él que para eso estamos bajo su infinita presencia.

- Descubriste o tal vez afloró sin forzar siquiera, una habilidad o una afición que no conocías o que quizás pensabas que no eran tan apasionantes.

- Has aprendido una no sino unas cuantas cosas, que ya sabes que se incorporarán de manera definitiva a tu catálogo personal. Hablamos desde aprender a cocinar nuevos platos y postres (muy importante este último punto), hasta una desconocida afición por el deporte, o por aumentar y alimentar tu mente y tu espíritu, etc... 

En definitiva, si en los tiempos del coronavirus no has aprendido, descubierto o incluso cambiado en algo, te diría sin mucho complejo que o tú eres el propio SARS-CoV-2 en persona, o eres peor que el mismo virus.

Esperando una respuesta diferente, original, mejor,...

Si te suelto una idea,

soy un ideólogo,

si te cuento una historia,

soy un cuentista,

si te digo que te quiero,

soy un perdedor,

si te confieso que lo he perdido todo,

soy un vencido,

si te odio con todas mis fuerzas,

estoy perdido.

Si te pregunto,

o si me preocupo por ti,

soy un interesado

porque estoy pensando en mi.

¿Has probado a cambiar de lentes?,

tal vez obtengas otras respuestas.

CAMBIAR es la más alta traición.

Descubrir calamidades lo hace cualquiera,

ahora, ver más profundo

y más allá de las miserias que pueblan esta piel,

solo lo conseguirás si...

si te lo dijera sería el listo,

un experto entrometido,

el aguafiestas que destroza las sorpresas.

LO QUE NUNCA CAMBIARÁ

Hay estados que son indiferentes al tiempo, palabras que son imperecederas, axiomas impertérritos,..., cosas (no muchas) que dan igual cuándo, dónde o por qué, en definitiva independientes e indiferentes a todo; y una de ellas eres tú, papá. Tú y toda tu vida, vida que ya ha sido escrita porque ya ha sido vivida. Terminó tal día como hoy hace cuatro años y nada de todo lo que fuiste ha cambiado, ya que sigo siendo tu hijo y eso también perdurará, perduraremos.

Y con otra de esas cosas de la vida, del corazón, que permanecerán por siempre como es la amistad, hoy te quiero hacer presente más allá de las paredes de los sentimientos de todo aquel, aquella que te conoció y te quiso.

Millones de gracias Simón, amigo de mi padre, millones de gracias, a ti y a todos sus amigos, y a toda la familia de mi padre que es la mía.

http://simoncandon.blogspot.com/2015/12/mi-amigo-paco.html