Hay estados que son indiferentes al tiempo, palabras que son imperecederas, axiomas impertérritos,..., cosas (no muchas) que dan igual cuándo, dónde o por qué, en definitiva independientes e indiferentes a todo; y una de ellas eres tú, papá. Tú y toda tu vida, vida que ya ha sido escrita porque ya ha sido vivida. Terminó tal día como hoy hace cuatro años y nada de todo lo que fuiste ha cambiado, ya que sigo siendo tu hijo y eso también perdurará, perduraremos.Y con otra de esas cosas de la vida, del corazón, que permanecerán por siempre como es la amistad, hoy te quiero hacer presente más allá de las paredes de los sentimientos de todo aquel, aquella que te conoció y te quiso.
Millones de gracias Simón, amigo de mi padre, millones de gracias, a ti y a todos sus amigos, y a toda la familia de mi padre que es la mía.
Francisco Javier, mientras que estemos, estará siempre con nosotros. Sabes que ha dejado su huella y eso, eso no es poco. Seguimos en la vida viviendola. Damos gracias, tú por haber tenido un padre como el que has tenido, y yo, por haber tenido a tu padre de amigo, que no es poco.
ResponderEliminarLa Amistad es mucho, es una de las más bellas expresiones de la libertad del ser, así que gracias infinitas por vuestra Amistad vivida, y eso, siempre estará, nunca cambiará.
EliminarSalud y libertad.